Mucha gente habla últimamente de IoT (Internet Of Things) por las muchas posibilidades que tienen las máquinas de facilitarnos la vida (o de complicárnosla). Nosotros nos apuntamos a la idea de que las máquinas más capaces de comunicarse pueden sernos de gran utilidad siempre que se cumplan ciertos supuestos:
1.- Que esa comunicación no complique los procesos habituales. Buscamos una integración «transparente»
2.- Que las señales que me pueden enviar las máquinas sean relevantes y sirvan realmente para algo concreto
3.- Que la comunicación sea fiable y segura
4.- Que la interacción con las máquinas sea sostenible económica y tecnológicamente
Si estás de acuerdo con estos principios verás que muchas de las ideas sobre la aplicación de IoT (o M2M como antes se la llamaba, Machine To Machine communication) a nuestra vida diaria no los cumplen. Esto resulta especialmente divertido en el mundo de las smart cities donde las empresas tecnológicas tratan de que las comunidades locales inviertan un montón de dinero en infraestructuras que a veces no se justifican. Sólo la crisis económica ha parado los pies a determinados políticos locales y a ciertas empresas para evitar tonterías contemporáneas.
Nosotros somos una startup (emprendedores a la busca de un modelo de negocio que realmente solucione algo a un número suficiente de gente) y no podemos permitirnos devaneos tecnológicos que nos van a solucionar la vida como las google glass o drones trayendo el pan a casa. Muchas de estas ideas funcionarán muy bien en el futuro. A mi me encanta la ciencia ficción. Mola mucho, de verdad, pero es que el que escribe esto vive en un piso y no acaba de ver claro -por poner un ejemplo clásico- cómo un dron se asome a su ventana y golpee el cristal para que la abra y me tire el pan dentro de casa. Por supuesto siempre podría instalar un sistema que abra la ventana automáticamente cuando vaya a llegar el dron, en una perfecta sincronización M2M. Si ya se quejan los vecinos cuando haces algo fuera de lo normal imagínate cuando en la reunión de vecinos se quejen del dron que lleva el pan al tipo del tercero M. Además he hecho unas cuentas por encima de lo que me costaría todo el invento y da para pagar el pan de todos los vecinos durante bastante tiempo.
En la búsqueda de algo realmente útil para gente normal que cumpla los principios que hemos escrito antes se nos ha ocurrido una solución tecnológica real y concreta que usa IoT. Y no solo se nos ha ocurrido sino que la hemos desarrollado y buscamos a alguien que la quiera probar con un coste tan pequeño que ni siquiera puedes compararlo con las soluciones de seguridad clásicas disponibles en el mercado.
¿De qué se trata esa solución Internet of things práctica?
Te lo cuento pero antes un poco de contexto. Supongamos que alguien tiene un local sin ocupar. Muchos edificios tienen bajos con locales cerrados o incluso hay edificios enteros vacíos por diversos motivos. Estos edificios no tienen vigilancia presencial de una compañía de seguridad porque resulta muy cara. Y en el caso de los locales sucede algo parecido con las alarmas típicas que se pueden contratar. El resultado es que a veces estos lugares son ocupados o simplemente asaltados y destrozados porque el dueño no puede costearse su seguridad durante mucho tiempo. Para estos casos en Shadow Digital hemos desarrollado una sencilla solución que utiliza elementos disponibles del Internet de las Cosas (IoT). Podemos instalar un sistema que utiliza la última tecnología probada disponible para detectar intrusos en un local o un edificio y lanzar una alarma indetectable a un coste muy inferior a los sistemas actuales de alarmas clásicos. Pasarás de pagar como mínimo unos 40€/mes a …. la décima parte: 4€/mes. En serio. Además puedes conectarte con una central de alarmas certificada por la Policía Nacional y adoptar otras medidas.
Si te interesa esta solución no dudes en ponerte en contacto con nosotros:
Santiago Coupeau
+34 699 200 202